Mataderos La Cooperativa Los Bajitos en lucha por la vivienda y la educación

Publicado el 23 Mar, 2017

Por Francisco Scarzella

Diciembre de 2008. El macrismo apenas pasaba su primer año de gestión en la Ciudad. La fragmentación de la oferta electoral “progresista” había derivado en el balotaje que por pocos puntos depositó a Macri en la Jefatura de Gobierno ante la sorpresa y desilusión de muchos. Transcurría sólo un año y su modelo de gobierno ya se veía a las claras. Subejecución y disminución de partidas presupuestarias en áreas sociales, intentos de despidos masivos en el Estado, ataque a los gremios estatales y docentes, grandes negociados con empresas amigas y creación de la patota de la UCEP, por recordar algunas de los hechos emblemáticos de aquel Macri que intentaba que lo llamaran simplemente “Mauricio”.

En un contexto nacional de recuperación económica y de reconstrucción social y política, la derecha neo liberal-conservadora empezaba a ganar espacios en la política por la vía electoral empleando representantes salidos de sus propias filas. Habían elegido como cabeza de playa el distrito más rico del país, utilizando como estrategia discursiva la dilapidación de la política a manos de la gestión y la explotación de prejuicios discriminatorios, xenófobos y racistas. La ciudad-puerto se daba el lujo de diferenciarse de “la ola populista” de la región aunque sin quejarse de su recaudación, que acusaba recibo mes a mes del crecimiento de las exportaciones primarias y del dinamismo de un mercado interno que no paraba de crecer gracias a las políticas implementadas desde la Nación.

Los Bajitos. Las jornadas de Diciembre de 2001 marcaron el nacimiento de una generación política. Lo que había sido resistencia en los noventa se organizaba para empezar a avanzar. En el 2002, desde un asentamiento del barrio de La Paternal varios grupos de familias se proponen dar la lucha por la vivienda digna organizados en distintas cooperativas. La organización y la lucha de las 85 familias de la Cooperativa Los Bajitos permitió la compra en 2007 de un terreno en el barrio de Mataderos y el compromiso del Gobierno de la Ciudad de otorgar un crédito para construir ahí sus viviendas. Con la llegada del macrismo, la entrega absoluta de la dinámica del suelo urbano a la lógica del mercado provocó una impresionante ola de desalojos que dejó a miles de personas en la calle. En una avanzada del gobierno PRO y la Justicia, con ayuda del desprestigio público a manos de los medios masivos de comunicación, el desalojo del asentamiento La Lechería aparecía como inevitable y la Cooperativa Los Bajitos acordó con el Gobierno que la salida sería ordenada y que sería un tránsito hacia la vivienda definitiva. El Gobierno se comprometía a otorgar el crédito para iniciar obra y la Cooperativa desocupaba el edificio. El apuro del desalojo obligó a los socios de la cooperativa a buscar una vivienda transitoria por los dos años que se estimaba la duración de la obra nueva. Un grupo de 50 familias decidió resolver esa situación de manera colectiva y construyeron sus viviendas transitorias en una parte del terreno de Mataderos.

Falsas PROmesas. Durante los días 19 y 20 de Diciembre de 2008, la llegada de los socios de la Cooperativa a su propiedad en Mataderos fue transmitida por los canales de televisión en una suerte de cadena nacional del prejuicio y la discriminación. Por su parte, el Gobierno no garantizó las condiciones de seguridad y los incidentes provocados por un grupo de violentos disfrazados de vecinos impidieron el ingreso de las 50 familias a su propio terreno. Estas 50 familias que se mudaban en conjunto fueron relocalizadas en un barrio de viviendas que había construido el Gobierno de la Ciudad en Villa Lugano en una solución que, después de varios años, se encamina a ser definitiva. El resto de las 85 familias del total que forman parte de Los Bajitos reclama desde entonces el inicio de la construcción en el terreno de Mataderos. Pasaron más de ocho años, cuatro presidentes del Instituto de Vivienda, dos gestiones completas de Macri al frente de la Ciudad y el Gobierno continúa sin dar las respuestas necesarias.

Que Macri haya prometido en la campaña presidencial continuar con el Fútbol para Todos, bajar la inflación o alcanzar la pobreza cero puede sorprender a muchos. A las familias de Los Bajitos, no.

Soluciones. Después de más de ocho años de cumplir con su parte del acuerdo, las 85 familias de la cooperativa le siguen reclamando al Gobierno que cumpla con la suya. Un crédito hipotecario para la construcción de las 35 viviendas restantes en Mataderos y la escrituración con crédito hipotecario de las viviendas de Villa Lugano. En función de que las viviendas de Mataderos serían 35 y no las 85 originalmente proyectadas, la Cooperativa está proponiendo la construcción de un proyecto ajustado a su nueva realidad y la construcción de una escuela en la otra mitad del predio. La necesidad de contar con más escuelas en la zona es una fuerte demanda de la comunidad educativa de la comuna, a la que desde 2012 le prometen la construcción de un Polo Educativo en Directorio y Murguiondo.

Una vez más, ante la falta de respuesta gubernamental, la organización popular avanza y propone. Es hora de que el Gobierno de la Ciudad dé respuestas a las demandas de los porteños.